
Silos
Los departamentos-silos están desapareciendo.
Si bien este modelo ha funcionado durante décadas, la modernización tecnológica de las empresas, la necesidad de respuesta rápida al mercado y una imprescindible mejora de la calidad, ha hecho inevitable la transición hacia una organización por procesos.
El modelo departamental ha tenido su razón de ser y sus ventajas, pero a día de hoy es una realidad que en algunas empresas cada departamento tiene sus propios objetivos y actividades, puntos de vista diferentes y a veces acciones no alineadas con la estrategia de la organización.
Se producen numerosos fallos de comunicación y a menudo duplicidad de funciones, contribuyendo así a una ineficacia general, y a no conseguir los resultados esperados.
La organización por procesos implica" visión global y transversalidad ", o sea conocimientos y acciones compartidas para un objetivo común.
Es necesario desarrollar procesos interelacionados que fomenten la integración entre unidades y el sentimiento de pertenencia en las personas.
Procesos que permitirán trabajar de forma fluida y contínua, enfocada única y exclusivamente a la calidad y al cliente.
