Talento

10.10.2020

Hablamos bastante del talento.

El talento, entendido como capacidad o aptitud, es muy deseable. Pero nuestra sociedad piensa que lo que no es un gran talento es mediocridad, y nos exige a TODOS que seamos únicos, geniales y diferentes, y no sé, en el planeta hay más de siete mil ochocientos millones de personas y quizás no todos cabemos en la cima del mundo
.
Además, a veces lo que entendemos por talento no deja de ser un rasgo extremo de nuestra personalidad que a menudo anula a otros y desequilibra el conjunto.

 Una afectividad mal orientada puede oscurecer una capacidad intelectual extraordinaria.

Siempre me he imaginado la personalidad como la rueda de los quesitos del Trivial. Son todos diferentes pero se complementan y ayudan a ganar el juego.

Por lo que es muy posible que la mejor capacidad, el auténtico talento -casi un don- sea tener el menor número de contradicciones internas posible; es decir, la coherencia y la integridad.

¿Qué rueda girará mejor por la vida, una ovalada o abollada, o la redonda, sencilla y perfecta?